Real Madrid ganó 3 a 1 y consiguió su 13° Champions League
Gareth Bale terminó siendo el gran protagonista de la tarde con un doblete desde el banco, sin embargo Karius tuvo la peor noche de su vida y le cuesta el título
Las emociones en Kiev están a flor de piel, en un partido que arrancó parejo para ambos equipos. La presión de Liverpool surgió efecto pero no pudo concretar en el arco rival, que tiene a unKeylor Navas, que con algunas intervenciones, fue clave para controlar la defensa del equipo.
La nota preocupante llegó para ambos equipos, pero con una baja inesperada e irremplazable. En 25 minutos de juego, una falta de Sergio Ramos sobre Salah (no cobrada), terminó con una grave lesión en el hombro del egipcio que debió abandonar el campo de juego entre lágrimas. En su lugar entró Adam Lallana.
Minutos más tarde, Carvajal fue el segundo lesionado del encuentro, luego de una inoportuna decisión de un taco que le generó una torción en la rodilla y con un llanto desconzolado, le dejó su lugar a Nacho.
La segunda etapa arrancó mejor para Real Madrid, que logró sentir la ausencia de Salah y el duro golpe que significó para Liverpool. En apenas dos minutos, tuvo la más clara del partido con un rebote que cayó en los pies de Isco, que pegó en el travesaño.
Sin embargo, un minuto después, Karim Benzema abriría el marcador con una viveza suya y un horror de Karius cuando quiso salir jugando de abajo. Dando un pase con la mano, el francés interceptó la trayectoria y no tuvo que hacer nada más para poner el 1 a 0, ante las inexplicables discusiones de sus compañeros.
Con ánimo, Liverpool fue en búsqueda del empate y apenas cinco minutos después del impacto, tuvo un corner a favor y no falló. Lovren ganó en lo alto y en el área chica, Mané corregió la trayectoria y puso el empate parcial.
Corriendo los 16 minutos de la segunda etapa, Zidane decidió sacar a Isco del campo de juego y en su lugar ingresó Gareth Bale, que tenía guardada una sorpresa. En sus primeros segundos en cancha, tomó un centro de Marcelo y de chilena volvió a poner en ventaja al "Merengue", con un gol memorable.
Los ingleses no se rindieron y fueron por todo. Mané se volvió a poner el equipo al hombro y tuvo la posibilidad de marcar el empate, pero el palo se lo negó. Luego los "reds" pidieron un penal de Casemiro, que no fue claro, pero no pudo doblegar a Navas.
A falta de siete minutos, el encuentro volvió a tener en Bale, con gran ayuda de Karius como responsable. Un zapatazo con potencia pero poco peligro, fue demasiado para el arquero y la pelota se le escurrió de las manos, marcando el 3 a 1, que sentenció las chances de su rival y confirmó la 13° Champions en la historia, la tercera de manera consecutiva.