La violencia en el fútbol parece no tener límites. Nuevamente, un árbitro fue agredido salvajemente en un partido de la Liga de Cañada de Gómez, Santa Fe, entre Barraca y Correa.
Todo empezó cuando Correa convirtió gol, aunque con polémica por una supuesta mano. El árbitro validó el gol a instancias del juez de línea, Marcelo Pereyra, a pesar de las protestas de todo los jugadores de Barraca, en especial de su arquero suplente, Durán.
Tan vehemente fue el reclamo que el árbitro decidió expulsarlo. Inmediatamente después de mostrada la tarjeta roja, corrió para buscar al asistente. Allí lo golpeó a trompadas y con una patada a la cara lo dejó inconsciente.
Finalmente, el juez agredido fue llevado al hospital de Cañada de Gómez por las heridas. En tanto, el arquero tuvo que ser sacado del campo por la policía y fue llevado a la comisaría donde recibió una denuncia por agresiones y lesiones.
Así fue la agresión al juez de línea