Las miradas estaban puestas en el equipo de Diego “Cholo” Simeone. Atlético de Madrid debía revertir la historia si quería llegar a la final. Mostró una buena imagen, pero no pudo ante Barcelona. Fue empate 1 a 1 y con este resultado, el equipo catalán llega a su cuarta final de Copa del Rey consecutiva.
Tras el partido de ida que culminó 2 a 1 en favor de Messi y compañía, ambos volvían a verse las caras para el partido de vuelta. Simeone apostó por un esquema más ofensivo, mientras que Luis Enrique confío en un 4-4-2 con Messi y Suárez arriba.
El “Colchonero” mereció mejor suerte en el primer tiempo. No dejó jugar al Barça y tuvo oportunidades para abrir el marcador. Sin embargo, Luis Suárez pegó primero tras una gran jugada y remate de Messi, el uruguayo sólo tuvo que empujar la pelota, tras el rebote de Moyá, para el 1 a 0. A pesar del gol, el Atlético todavía debía meter dos goles para extender la definición.
En el segundo tiempo, los dos se quedaron rápidamente con diez jugadores por las expulsiones de Sergi Roberto y Yannick Ferreira Carrasco. Los de Simeone continuaron con las situaciones de gol y, luego de una gran jugada colectiva, Antoine Griezmann definió cruzado para convertir su tanto. Sin embargo, el asistente cobró posición adelantada. Estaba habilitado.
Por su parte, Barcelona apostaba al contraataque y tuvo una situación muy clara en los pies de Messi. Un tiro libre de la “Pulga” pegó en el travesaño y se fue por el costado. En el partido de ida, Moyá le había sacado una oportunidad similar.
Faltando diez minutos, el sufrimiento de los hinchas catalanes fue mayor debido a una supuesta falta de Gerard Piqué dentro del área a Kevin Gameiro. El propio delantero francés pateó el penal, pero su remate se fue por arriba del travesaño.
Pocos minutos después, Gameiro tuvo revancha. Una buena jugada colectiva terminó con el francés empujando la pelota para poner la igualdad y darle esperanzas al equipo de Diego Simeone.
Sobre el final, Suárez recibió la roja por un supuesto codazo, con lo cual, más sufrimiento para el equipo de Luis Enrique y su gente sobre el final del partido. No hubo mucho más. El árbitro decretó el final del partido y la clasificación del equipo culé. Barcelona jugará la final de la Copa del Rey contra el ganador de la serie entre Celta y Alavés. En el partido de ida, ambos igualaron 0 a 0.