En recitales, cuando el gorro, el silbato y la matraca salen a bailar en el carnaval carioca. Incluso bajo la lluvia inspiradora de una buena ducha. En esos y otros tantísimos escenarios de la vida se entonan varias de las populares estrofas de la Mona Jiménez, que cautivaron los corazones en toda la Argentina.

Pero en las últimas horas, el cantante cordobés tuvo motivos para sorprenderse como nunca antes. Si bien no es la primera vez que se escucha en una cancha de fútbol, uno de sus cuartetos viajó más de 18 mil kilómetros de distancia y llegó a tierras japonesas.

En Nagano, una ciudad de Japón, tiene sus bases el club Matsumoto Yamaga, que juega en la Segunda División de ese país. En un teatro de dicha localidad, los dirigentes de la institución armaron una gala para presentar a sus refuerzos. Entonces, los hinchas le pusieron color al evento y respondieron con una fiesta al compás de "Beso a Beso".

Sí, los fanáticos del Matsumoto Yamaga tomaron como propia la canción de la Mona y echaron a flamear banderas frente a los jugadores que estaban ubicados en el escenario, mientras saltaban al ritmo del famoso cuarteto.