Según recuerda, “Rey de Corazones” fue la primera canción que escuchó Pablo Cruz Guerrero de Luis Miguel. Hasta hoy es su favorita del artista. “Creo que le daría un abrazo en son de agradecimiento, porque su vida ha dado pie a que estemos juntos el día de hoy”, confiesa el actor mexicano, en diálogo con Filo.News. 

En abril se estrenó la nueva temporada de “Luis Miguel: la serie”, que presentará un capítulo por semana. El actor será el encargado de interpretar a Patricio Robles, el nuevo integrante del equipo de difusión y publicidad del cantante, contratado por Hugo López, el personaje al que le da vida César Bordón. 

Según aclaró el actor al diario El Universal, se trata de un personaje ficticio, construido en base a diferentes managers que trabajaron con el artista durante la década de los ‘90. Será uno de los grandes villanos de esta nueva temporada, que se acercará por interés y conveniencia: “Había muchos que se acercaban con ciertas intenciones, entonces absorbí eso”, dijo a ese medio y siguió: “Si yo en mi personaje quiero obtener la confianza de Luis Miguel en una época en la que él era un dios, la manera es ganarme su respeto”.

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Oriundo de México, Pablo Cruz Guerrero comenzó estudiando la carrera de administración, aunque no tardó en descubrir que su verdadera pasión estaba arriba del escenario. Es por eso que se inscribió en el Centro de Educación Artística de Televisa, donde empezó a participar de varias obras de teatro como “Las brujas de Salem” o “Las tres hermanas”.

Su llegada a la televisión fue con el papel de Alejandro Villaseñor en “Papá a toda madre”, Emiliano en “Perseguidos” o Daniel en “Cuando me enamoro”. También trabajó en “Por siempre mi amor”, “Verano de amor” o “Querida enemiga”.

A su vez participó en diferentes proyectos en la pantalla grande; entre los más destacados podemos nombrar “Sin memoria”; “From Prada to Nada”, “Casi Divas” o “El estudiante”, donde compartió elenco con Norma Lazareno, Cristina Obregón y Jorge Lavat.

Tras esta experiencia se suma a la nueva temporada de la serie de Luis Miguel, que llega durante un año pandémico: “Se ha topado con mi vida en un momento de pausa, de introspección, reflexión, y eso me ha permitido a mi tal vez reencontrar mi pasión por mi carrera, gracias a lo que compartí en escena con todos mis compañeros”, dijo el artista a Filo.

Luego siguió: “Me encuentro muy entusiasmado, estoy en un momento de mi vida donde estoy con el corazón muy abierto y dispuesto a presentar mi trabajo y el trabajo de todos nosotros con el resto del mundo, que se que va a ser una cosa que va a ser bien recibida”.

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El estreno llega tres años después del estreno de la primera temporada, donde pudimos ver el nacimiento de la estrella y sus primeros pasos en la fama. También la relación con su papá, Luisito Rey, quien manejaba toda su carrera como su manager. Así también relata la desaparición de su mamá, Marcela Basteri, el comienzo de la investigación, como también la revelación del artista contra la explotación y la estafa. Sus primeros amores, sus primeros hits y sus sueños. 

“Cuando vi la primera temporada pude notar un producto de absoluta calidad, una historia increíblemente conmovedora, que me gustaba mucho más allá que otras bio series que se estaban haciendo en el momento. Latinoamérica representa una calidad de producción de contenido en todo el mundo, muy marcada, es un territorio muy importante”, confesó Cruz Guerrero a Filo.News.

Los nuevos episodios muestran dos líneas de tiempo y con una trama que explorará las dificultades que enfrentó Luis Miguel (Diego Boneta) para equilibrar su vida familiar y profesional. En la cima de su éxito en los noventa, el artista queda a cargo del cuidado de sus hermanos tras la muerte de su padre e intenta enmendar la relación con su novia Érika (Camila Sodi). 

También Hugo (César Bordón), representante y figura paterna para Micky, lucha contra el cáncer, y un nuevo representante, Patricio Robles (Pablo Cruz Guerrero), agita las cosas en la agencia de talentos. Mientras intenta descifrar la misteriosa desaparición de su madre, Luis Miguel sana su propia herida paterna al reconectarse con su hija distanciada, Michelle (Macarena Achaga), a quien no ve desde hace más de una década.

Sin dudas representa un gran desafío para el actor: "Este personaje ha hecho tanto por mí... principalmente ayudar a reencontrarme con el amor que tengo por la actuación. Todo se construye con storytelling. ¡Gracias por uno de los viajes más chingones de mi carrera hasta hoy!”, escribió en su Instagram.

En diálogo con este medio finaliza: “Para mi representar un personaje que fuera parte de una historia tan trascendental y que esta moviendo masas como en algún momento lo menciona el personaje de Luis Miguel en la serie, quiere mover masas, esta serie lo ha logrado y no me queda más que estar agradecido por ello”.

Desde Filo.News también hablamos con Macarena Achaga y Diego Boneta por el estreno de la temporada. “Hay muchas cosas argentinas que tiene Michelle en la serie”, dijo la actriz; por su parte, el actor añadió: “Sé que la espera fue larga, pero fue precisamente porque para nosotros era tan importante que la calidad de la historia fuera a la altura que el público merece”.