La esquizofrenia afecta a más de 21 millones de personas alrededor del mundo. Se da más frecuentemente y se inicia más temprano en hombre que en mujeres; motivo por el cual un grupo de investigadores se dispuso a buscar genes específicos del sexo relacionados con la enfermedad, encontrando que hasta un 61% de ellos tienen incidencia en la misma.
La esquizofrenia se trata de un trastorno del neurodesarrollo caracterizado por una distorsión del pensamiento, las percepciones, las emociones, el lenguaje, la conciencia de sí mismo y la conducta. Se manifiesta típicamente después de la adolescencia y se estima que alrededor del 50% del riesgo de esquizofrenia tiene bases genéticas, mientras que el resto se explica por mecanismos relacionados con el ambiente.
Un equipo coordinado por la Universidad de Helsinki, la Universidad del Este de Finlandia y el Instituto Karolinska en Suecia, publicó un estudio sobre esta enfermedad enfocándose en los genes y proteínas que se expresan de manera diferencial en hombres y mujeres.
Para tal fin, lo que hicieron fue usar células madre pluripotentes inducidas, es decir, células adultas modificadas para que tengan las propiedades de las células madre embrionarias. En otras palabras: células que, al ser modificadas genéticamente, actúan de manera similar a las células madre embrionarias, las cuales tienen la capacidad de convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo.
Mediante esta técnica, tomaron células de la piel para generar neuronas. Los participantes fueron pares de gemelos monocigóticos —genéticamente idénticos— de los cuales uno padecía esquizofrenia y el otro no.
Aunque de los19.462 genes solo la expresión del 12% de ellos difiere en hombres y mujeres sanos, se encontró que el 61% de los genes relacionados con la enfermedad son específicos del sexo. Esto puede explicar por qué los síntomas aparecen después de la adolescencia, período en el que se da la maduración sexual.
Según la Organización Mundial de la Salud, más del 50% de los esquizofrénicos no recibe una atención apropiada. Puede afectar al desempeño educativo y laboral y los esquizofrénicos suelen sufrir estigmatización, discriminación y la violación de sus derechos humanos. Los resultados del estudio sugieren que hombres y mujeres con esquizofrenia necesitan un tratamiento diferente, pudiendo resultar en terapias más apropiadas y beneficiosas.