Los tiempos de Barack Obama son historia y parece que Donald Trump intenta terminar con gran parte de la política de su antecesor. El nuevo líder de Estados Unidos firmará un decreto para concluir con un programa que buscaba desalentar los niveles emisión de gases perjudiciales para el medio ambiente.
El nuevo decreto, llamado de Independencia Energética, terminará con el trabajo que había hecho Obama para combatir el daño ambiental que producen las diferentes industrias.
La propuesta de Trump le daría tiempo a las centrales eléctricas que funcionan a partir del carbón, importantes en la producción energética estadounidense.
El Presidente norteamericana no la tiene tan fácil: 30 gobernadores impusieron un reclamo para frenarlo ante la Justicia de ese país.