Este año, el inicio del ciclo lectivo en la Ciudad y en el país no fue convencional. Luego de tires y aflojes, finalmente la cartera educativa de CABA decidió, con el aval del Ministerio de Salud de la Nación, comenzar las clases el 17 de febrero con la mayor presencialidad posible. Si bien la atención está puesta en lo particular de este año que es la vuelta a las aulas en pandemia, hay un problema de poca prensa que continúa presente desde hace años y cada vez es más grave: la falta de vacantes en la Ciudad de Buenos Aires.

"No tenemos datos oficiales. En realidad, el Ministerio en los últimos años se ha venido negando a entregar esos datos así que los que manejamos son los que pudieron conseguir distintos medios de prensa en 2020", introdujo a Filo.news Patricia Pines, docente y voluntaria en Vacantes Para Todxs, una organización que ayuda dando herramientas y acompañamiento a familias perjudicadas por la falta de lugar en las escuelas, la cual lleva realizados más de 700 amparos judiciales y sólo durante este año, 250.

El año pasado, 16.364 chicos, chicas y adolescentes estaban en lista de espera para obtener una vacante, según datos que relevó Tiempo Argentino. La gran mayoría corresponde al Nivel Inicial (12.370), luego al Nivel Primario (3.355) y, por último, al Nivel Secundario, con 639. A esta cifra se suma la cantidad de chicos y chicas que están en los Centros de Primera Infancia (CPI) y Centros de Desarrollo Infantil (CeDI), unos 12 mil. En suma, el número de chicxs sin vacante alcanza al menos los 28.364.

Las cifras de este año no se conocen, pero como todos los años, aumenta. "Sabemos que hay más faltantes pero no tenemos todavía el estimado", explicó Micaela López Rodríguez, una de las fundadora de La Vacante es un Derecho, otra organización que acompaña y asesora a familias que no pueden inscribir a sus hijxs en los establecimientos estatales. Además, indicó que hubo familias que se enteraron dos días antes del inicio del ciclo lectivo si tenían o no tenían vacante. "Esto es irrisorio, es muy difícil una organización familiar en este tipo de condiciones", apuntó López Rodríguez.

Para Pines, "no hay voluntad política de resolver el problema sino que el Ministerio y la Legislatura siguen recortando y subejecutando presupuesto para infraestructura escolar".

En enero pasado, el gobierno de la Ciudad realizó una quita de fondos al Plan Sarmiento -destinado a proveer a estudiantes de dispositivos tecnológicos- de 371 millones de pesos, que giró a la Dirección de Educación de Gestión Privada. Esto fue publicado en 4 de enero en la Resolución Nº 1464/SSHA/20 y se detalla en la página 6 del Anexo I, donde el subsecretario de Hacienda del Ministerio de Hacienda y Finanzas, Gustavo Arengo Piragine, resolvió la transferencia de fondos.

También se suma el recorte que hubo en el presupuesto 2021 al área de infraestructura escolar, el cual pasó de ser de $1798,1 millones en 2019; a $3068,7 millones en 2020; para llegar a $1140,4 millones, en 2021. Es decir, se redujo en poco más de un tercio.

Ambas organizaciones involucradas con la falta de vacantes se sumaron también al reclamo por una vuelta segura y cuidada a las aulas en el ciclo lectivo entrante. En este sentido se creó recientemente la organización Familias por un retorno seguro a las escuelas, cuyo objetivo es "denunciar que no fueron garantizadas las condiciones de seguridad para el retorno a la presencialidad".

"Con una ministra en la Ciudad y un ministro nacional que claramente desconocen la realidad de las escuelas públicas, no se hizo ninguna inversión en infraestructura, ni en mobiliario, ni reacondicionamiento de los espacios; tampoco en más personal de limpieza, elementos de higiene; no se crearon más cargos docentes para atender la presencialidad y la virtualidad en simultáneo; no se entregaron computadoras ni se garantizó la conectividad", criticó Pines.

También reclamó que existen cargos docentes sin cubrir y que la presencialidad se está dando "con 104 casos de docentes y auxiliares positivos en 8 días, con 88 grupos de estudiantes aislados en menos de una semana de clases, más de 7500 casos y alrededor de 155 muertes por día, más de 51.700 muertes en un año por Coronavirus y más de 2 millones de casos en total".

En tanto, López Rodríguez expresó: "Lo que nos preocupa a las familias es que hay una condición de obligatoriedad y de asistencia diaria que pone en perjuicio nuestras vacantes. Es decir, ¿qué pasa con aquellas familias que por múltiples razones no pueden acercarse a la institución? Entendemos que seguimos en una ciudad donde hay chicos y chicas que se les asigna una vacante muy lejos de su casa y que en estas condiciones de pandemia no es lo mismo que la vida como la conocíamos antes". Y preguntó: "¿Qué pasa con las familias donde hay responsables que no pueden ausentarse por pocas horas?".

"Estamos siendo como guardianes de las vacantes: que a nadie ni siquiera lo amenacen con sacarle su vacante por no poder presentar al niño por no poder cumplir con los requisitos de esta nueva escolaridad", agregó.

"A esto obviamente se suma la gravedad de aquellas familias que ni siquiera tienen vacante y que en muchos casos ya son dos o tres años en la misma situación", sostuvo Pines y concluyó: "Las familias que se encuentran en lista de espera tienen doblemente el derecho vulnerado porque no acceden ni a la educación ni a los alimentos".