La figura de Sulemaini, asesinado ayer en Bagdad por fuerzas estadounidenses, era importantísima, dado que desde 1998 comandaba la fuerza Quds, lo que lo convirtió en uno de los personajes más populares e influyentes del Irán.
La Fuerza Quds es un brazo paramilitar de élite del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC), la organización militar más grande de la República Islámica de Irán, y es considerada como un grupo terrorista por Estados Unidos .
Su objetivo es llevar adelante acciones de guerra no convencionales y operaciones militares de inteligencia y, según se cree, funciona como apoyo de diversos actores no estatales en varios países, incluyendo a Hezbollah en el Líbano, Hamas en la Franja de Gaza y las milicias shiítas de Irak, Siria y Afganistán.
Esta fuerza, que surgió como la rama de asuntos externos de facto durante la expansión del IRGC, tiene entre 10 mil y 20 mil integrantes (aunque algunos hablan de hasta 50 mil) y reporta directamente al Líder Supremo de Irán, el Ayatollah Khamenei.
Su nombre significa Jerusalén en farsi y árabe, y se debe a que uno de los grandes objetivos de la organización es "liberar" esa ciudad.
Quds ha sido acusada por Estados Unidos y la Unión Europea de distribuir armas en Siria para ayudar al régimen de Bashar al-Assad a reprimir a los rebeldes y de entrenar talibanes en Medio Oriente. También se la ha vinculado con diferentes ataques mortales, como el atentado contra los cuarteles en Beirut en 1983, en el que murieron más de 300 personas.
Dado que no participa de manera directa en las incursiones militares sino que brinda apoyo y asesoramiento, las acciones subrepticias de Quds le permiten a Irán negar su participación en todos estos acontecimientos (y, por lo tanto, evitar la guerra directa con Estados Unidos).
Los miembros son reclutados por sus habilidades y su grado de lealtad a la República Islámica, y desde su fundación en 1979, su objetivo principal es extender la influencia del país en la región.