El jefe de Gabinete, Marcos Peña, consideró que el paro nacional convocado por la CGT tiene un "sentido político" porque los sindicatos "son de la oposición, son del Partido Justicialista". La medida de fuerza, en tanto, promete paralizar la Argentina durante 24 horas.
"Se da en un contexto de una baja conflictividad sindical que hemos tenido en estos dos años y medio contra el pronóstico de muchos que creían que este era uno de los factores que iba hacer difícil un cambio en la Argentina ya que los candidatos son del Partido Justicialista y tienen una tradición de conflictividad con gobiernos no peronistas", afirmó Peña.
El jefe de Gabinete le bajó el tono a la medida de fuerza al sostener que "no hay una consigna detrás del paro, es un paro más político, que tiene poco para aportarle a los desafíos que tiene la Argentina hoy".
En la práctica -agregó Peña- el martes el Gobierno va a tener que sentarse a trabajar con la CGT como lo hace permanentemente. Nosotros hemos sido muy claros: ninguna disidencia va a impedir sentarnos a dialogar al día siguiente para sacar al país adelante", expresó Peña.
Según Peña, lo importante es que casi todos los sindicatos tienen alguna cláusula de revisión para que el salario no pierda frente a la inflación, que con esta devaluación "se ha proyectado que va a ser mayor a lo que se esperaba".