Este jueves, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio a conocer, en base a la evidencia científica que fueron recolectando durante este último año, que la duración de la inmunidad que ofrecen las vacunas contra el COVID-19 se extiende hasta seis meses después de haber recibido la segunda vacuna.
Así lo aseguró Kate O'Brien, directora del Departamento de Inmunización de la entidad, en una conferencia de prensa, indicando que la duración de hasta medio año aplica también para las vacunas monodosis como la de Janssen.
De esta forma, el grupo que asesora a la OMS en cuestiones de inmunización emitió hoy las conclusiones del análisis de datos en los dos últimos días, pero señaló que es muy pronto para pronunciarse sobre la nueva variante Ómicron y cómo responde a las vacunas.
Por su parte, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advertió que dicha variante podría impactar en el curso de la pandemia, habiéndose detectado en 57 países y esperando que el número siga creciendo en los próximos días.
"Ciertas características de la Ómicron, incluida su propagación global y el gran número de mutaciones, sugieren que podría tener un impacto importante en el curso de la enfermedad.Todavía es difícil saber exactamente cuál será ese impacto", fueron sus palabras.
Así las cosas, el grupo consultivo sobre vacunas de la entidad recomendó también que se ofrezca una dosis de refuerzo contra el COVID-19 a las personas inmunodeprimidas o que hayan recibido una vacuna inactivada, como por ejemplo la de Sinopharm.
Esta recomendación se da después de que el Grupo de Expertos en Asesoramiento Estratégico (SAGE) en materia de inmunización llevara a cabo una reunión el martes para evaluar la necesidad de las inyecciones de refuerzo contra el COVID-19.