Después de debatir por casi cuatro horas, la Confederación General del Trabajo no logró avanzar en el proceso de renovación de autoridades y resolvió entrar en un cuarto intermedio hasta el 3 de mayo.
Esto se dio a raíz de las diferencias internas en torno al reparto de cargos para la nueva conducción, como también con las fechas para convocar al Comité Confederal y el congreso normalizador.
Además, expresó su "más enérgico repudio" contra el fallo de la Corte Suprema de Brasil que habilitó la detención de Lula Da Silva y denunció una "proscripción" contra el ex presidente que planeaba participar de las próximas elecciones presidenciales.
En el comunicado de la CGT, dijeron: "Rechazamos la vulneración del derecho a la libertad hasta tanto no exista una sentencia definitiva. El golpe institucional que empezó con la destitución de la compañera Dilma Rousseff hoy se consagra con la injusta decisión judicial".
Y agregó: "Los trabajadores de la Argentina nos solidarizamos con los trabajadores de la hermana República del Brasil y con el compañero Lula".
"Repudiamos, asimismo, la inapropiada intromisión de altos mandos de las fuerzas armadas brasileras, que atentan contra la convivencia y la democracia. Defendemos el derecho del pueblo brasileño a elegir democráticamente a su nuevo gobierno con la participación de todos los candidatos", finalizó.