Este domingo, el papa Francisco hizo un llamado para poner fin a la "masacre" y al "inaceptable ataque armado" en Ucrania y aseguró que, de lo contrario, las ciudades se convertirán en “cementerios".
Según la agencia de noticias AFP, el pontífice argentino señaló que la localidad portuaria de Mariupol, ubicada al sur de Ucrania, gravemente atacada por Rusia, "se ha convertido en un lugar mártir en la desgarradora guerra que está devastando al país”.
Luego de su oración dominical, Francisco expresó: "Frente a la barbarie de la matanza de niños, personas inocentes y civiles indefensos, no hay razones estratégicas, solo se debe detener el inaceptable ataque armado, antes de que reduzca las ciudades a cementerios".
"En el nombre de Dios, les pido que detengan esta masacre", manifestó.
Asimismo, el pontífice pidió “que se escuchen los gritos de los que sufren y que cesen los bombardeos y los atentados. Que haya un enfoque real y decisivo en la negociación, y que los corredores humanitarios sean efectivos y seguros”, informó el portal de información de la Santa Sede, Vatican News.
La semana pasada, el cardenal polaco Konrad Krajewski, limosnero del Vaticano, llegó a Ucrania en representación del papa Francisco, quien le solicitó permanecer allí el tiempo necesario para apoyar al pueblo ucraniano "en estos momentos dramáticos de su historia".
Un día después del comienzo de la invasión militar a Ucrania, iniciada el pasado 24 de febrero, la máxima autoridad de la Iglesia Católica visitó la embajada rusa ante el Vaticano, donde se reunió con el embajador para tratar de mediar en la crisis. Luego, Francisco pidió frenar los ataques armados, abrir corredores humanitarios para los refugiados y buscar una salida diplomática al conflicto.