Tras los pedidos de la Cámara de Diputados y las votaciones llevadas adelante, Julio De Vido vuelve a estar procesado en una nueva causa de corrupción y se declaró la prisión preventiva por orden del juez federal Claudio Bonadio.
Esta nueva causa se suma a la de desvío de fondos del yacimiento de Río Turbio, confirmado por la Cámara Federal, y por la que el martes se debatirá el desafuero y arresto del ex funcionario kirchnerista en el Congreso.
Además de De Vido, se procesó a su ex mano derecha en el Ministerio de Planificación Federal, Roberto Baratta, que, según la Justicia, tuvo un rol importante en la compra de barcos de gas natural líquido, al estar a cargo de la Subsecretaría de Control y Gestión.
En dicha investigación, el juez Bonadio, junto al trabajo del fiscal Carlos Stornelli, también a cargo de la causa de Río Turbio, realizaron un peritaje en el que se determinó una defraudación de 6.995.926.798 dólares por sobreprecios.