Este martes, el Gobierno anunció, a través de la asesora presidencial Cecilia Nicolini, que se retomaron las negociaciones con Pfizer para adquirir dosis, en medio de la segunda ola y la demora en la llegada de vacunas.
"Se han retomado las negociaciones con Pfizer para también entender cuál es el estado de situación o como se puede generar algunos cambios para avanzar en un contrato", planteó Nicolini, en declaraciones a radio Futurock. El fin de semana, también lo había adelantado el presidente, Alberto Fernández.
"Las negociaciones a veces sufren algunos impases, se frenan, luego se retoman, en ningún caso están cerradas o imposible de poder firmar o avanzar. Ahora, tiene que haber acuerdos entre las partes, y eso significa ponerse de acuerdo en la clausulas que en su momento no estábamos de acuerdo, sino también tener una propuesta interesante para la Argentina de entrega de esas vacunas en tiempo y forma", indicó la funcionaria.
En diciembre del año pasado, el entonces ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, y el presidente Alberto Fernández explicaban por qué el gobierno no continuó con la negocación para adquirir las 30 millones de dosis de Pfizer.
"Ellos cambiaron las condiciones", dijo González García. "En la negociación se nos pidió una ley que les diera inmunidad, esa ley salió. Después, desde la casa central de Pfizer en EEUU decían que esa ley no era suficiente, que había que hacer una nueva ley, y además que el contrato no lo firmara yo sino el Presidente; son condiciones un poco inaceptables", detalló.
Sobre esto, el presidente explicaba: "Pfizer nos pidió una Ley de Vacunas, y nosotros cumplimos. Y ahora nos piden otra ley para evitar responsabilidades penales, si las vacunas causan daños físicos. Esa inmunidad jurídica no se la vamos a dar. Ellos son responsables de las vacunas. No es el Estado Nacional. El Estado compra y ellos venden. No entiendo por qué tenemos que darle una norma que los pone al margen de las responsabilidades civiles y penales".