A más de dos meses de la desaparición de Santiago Maldonado tras una violenta represión de la Gendarmería contra la comunidad mapuche en Chubut y a pesar de las múltiples recomendaciones de organismos de derechos humanos nacionales e internacionales, el Gobierno impidió que la ONU brinde asistencia en la investigación sobre el joven desaparecido.
El ministro de Justicia, Germán Garavano, fundamentó en motivos de "soberanía" y "burocráticos" la marcha atrás que dio el Gobierno en autorizar al organismo internacional a sumarse a la investigación por Maldonado a través de asistencia técnica.
"La decisión era un tema que a poco de andar se verificó que tenía varias dificultades en términos formales y burocráticos y en términos de lo que es la soberanía y la jurisdicción del propio juez", lanzó el funcionario.
Y justificó: "Nosotros seguimos en contacto con el Alto Comisionado de la ONU, al cual se manifestó que no era el momento para avanzar en esa situación".
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU había expresado su preocupación por la "falta de progreso en las investigaciones", y pidió a las autoridades "realizar la investigación apegándose a los estándares internacionales en materia de derechos humanos, en particular a la Convención para la protección de las personas contra las desapariciones forzada".