La situación económica del país impacta sobre distintos sectores comerciales. Cerrarán la planta en Balvanera donde trabajan alrededor de 60 personas. Además, no promoverá la comercialización con locales propios y franquicias y pasará todos a manos de terceros.
De casi 120 heladerías, alrededor de 20 son propias y pasarán a ser franquicias. El objetivo de la empresa es mantener el prestigio de la marca, los planes de marketing, la fabricación del producto y el transporte.
Según el comunicado de la empresa buscan "fortalecer la marca y hacerla aún más competitiva a nivel mundial" y que "buscan potenciar a empresarios, pymes y emprendedores, sin afectar la cantidad de gente que trabaja en la marca".
A principio de año había rumores de ventas a grupos internacionales y por eso habían implementado retiros voluntarios para ajustar el personal.