Con Evo Morales en los Estados Unidos Mexicanos, Jeanine Añez se declaró la nueva presidenta de Bolivia luego del golpe de Estado que obligó a renunciar a Evo Morales, Álvaro García Linera y el resto de representantes del MAS en la línea sucesoria.
La mujer citó el artículo 169 de la Constitución que asegura que “en caso de impedimento o ausencia definitiva del presidente del Estado, será reemplazado en el cargo por el vicepresidente y, a falta de éste, por la presidenta del Senado, y a falta de ésta por el presidente de la Cámara de Diputados”.
Si bien el presidente, el vice y los siguientes en la línea sucesoria sí renunciaron como indica la Constitución, no hubo ninguna Asamblea Legislativa que la nombre presidenta ya que no había quórum.
Incluso Añez "juró" ante una sala casi vacía, donde había solo algunos legisladores opositores.
En caso de haber habido quórum debería ser la encargada de manejar el Ejecutivo boliviano ya que ni la encargada del Senado (Adriana Salvatierra) o Diputados (Rolando Borda) están, por lo cual ahora se le encargaría la tarea a los dos vicepresidentes (primeros y segundos, respectivamente) de ambas cámaras legislativas.
Como en el caso de Rubén Medinacelli, primer vicepresidente de la Cámara Alta, también renunció, la facultad constitucional en este espiral de salidas recaería en la segunda vicepresidenta del Senado, Jeanine Añez, del partido Unidad Demócrata.
Senadora de Unidad Democrática para el departamento de Beni, la legisladora fue miembro del Comité Ejecutivo Nacional del Movimiento Demócrata Social, directora del medio de comunicación "Totalvisión" y constituyente entre 2006 y 2008 para la redacción de la nueva carta constitucional.
Parte del espacio opositor que instó a Evo Morales a convocar a nuevas elecciones exigiendo la renuncia de los miembros del Tribunal Electoral, Añez se muestra confiada en poder convocar elecciones previo al 22 de enero, fecha en que debería asumir una nueva administración.
“Vamos a convocar a elecciones. Todos queremos trabajar. Esto será como el pueblo boliviano lo quiere, un tema simplemente de transición. Vamos a llamar a elecciones con personalidades probas que reflejen el sentimiento de todos los bolivianos”, precisó Añez.