Así es la "Escuela pública itinerante" en la Plaza del Congreso
Habrá actividades culturales y artísticas que se combinarán con los reclamos políticas y salariales de los docentes. Conocé todo sobre la estructura que quedará armada hasta el miércoles próximo
La "escuela pública itinerante" en la Plaza del Congreso, inaugurada este miércoles, será el lugar donde se manifestarán los gremios docentes hasta el próximo miércoles para manifestar su reclamo por una paritaria nacional y la ley de financiemiento educativo.
Durante los próximos siete días, el aula albergará una cargada agenda de actividades que comprenderá clases públicas con estudiantes, debates sobre la situación gremial y charlas con especialistas en temáticas vinculadas a la educación.
Fue concebida por los sindicatos de la educación como un nuevo símbolo de "resistencia", con evidentes reminiscencias a la "Carpa Blanca" que fue emblema de la lucha docente a finales de la década del noventa.
Está previsto que por el lugar pasen desde diputados y senadores de la oposición, referentes de Derechos Humanos, referentes de la cultura y del movimiento obrero organizado.
Instalada en el mismo lugar donde se emplazó la Carpa Blanca entre 1997 y fines de 1999, "la escuela itinerante" mide 20 metros de largo, 10 de ancho y 3 de alto. Su frente simula la fachada de una escuela pública, con una maestra con guardapolvo y una estudiante, además de ventanas y el escudo nacional en el vértice superior.
En la fachada, también hay leyendas que resumen las dos grandes reivindicaciones del sector (vinculadas entre sí): "Ley de Financiamiento Educativo", "Paritaria nacional docente", y una tercera con el lema de las últimas manifestaciones docentes: "La escuela pública resiste, enseña y sueña".
Al ingresar por el portón de la escuela se puede apreciar una escultura que representa a la Carpa Blanca y un muñeco a gran escala de una alumna de escuela primaria con un cartel del gremio bonaerense SUTEBA.
El aula en sí es un rectángulo cubierto de alrededor de diez metros de largo y siete de ancho provisto de sillas, un escritorio, la bandera argentina y un pizarrón detrás.
En las paredes del aula hay afiches en gran escala que condensan imágenes de los hitos fundamentales de la historia de los gremios docentes, y un cartel que recuerda a Carlos Fuentealba, el maestro asesinado en Neuqúen en 2007 por la policía que respondía al gobernador Jorge Sobisch..