Con una nariz puntuda, una infaltable verruga, gorro alto, pocos dientes y la mandíbula desplaza, se presentan las brujas en los dibujitos, cuentos, historias de terror y películas. ¿Pero eran realmente así? ¿De dónde vienen?
Bueno. Malas (o buenas) noticias. Todas esas historias están mal contadas. Nadie nos dijo la verdad cuando nos relató los cuentos de miedo y si bien la verdadera historia de estas mujeres es siniestra y tenebrosa, no lo es por lo que hacían sino más bien por lo que les hicieron durante siglos.
Pese a que no hay demasiados documentos, salvo algunas declaraciones de las propias brujas mientras eran torturadas, este exterminio data de fines del siglo XV, XVI y XVII y la historia la escriben quienes ganan (que no es el caso de estas brujas), hay investigaciones y teorías que aseguran que estas mujeres lejos estaban de ser lo que nos pintaron que eran.