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Liberaron a Gypsy Rose Blanchard, la joven víctima del síndrome de Munchausen por poderes

Luego de cumplir el 85% de la condena por el asesinato de su madre, quien la había mantenido prisionera y la obligaba a fingir que estaba enferma, la joven de  32 años recuperó su libertad.

Liberaron a Gypsy Rose Blanchard, la joven víctima del síndrome de Munchausen por poderes

Gypsy Rose Blanchard salió de prisión este jueves, 28 de diciembre, tras cumplir 8 años de su condena por haber sido cómplice del asesinato de su madre, Dee Dee Blanchard.

El caso tomó relevancia tras el asesinato de Clauddine “Dee Dee” Blanchard en 2015 donde su hija, y el novio de ésta fueran arrestados por el homicidio. Gypsy, de entonces 23 años, había convencido al joven de cometer el crimen para librarse de los abusos de su progenitora en el 2015.

Clauddine "Dee Dee" Blanchard aseguraba que su hija tenía leucemia y distrofia muscular. Ocultó su edad real y le mintió a médicos acerca de su estado de salud. Además, la forzó a usar silla de ruedas y una sonda de alimentación, entre otros tratamientos.

Su objetivo era conseguir reconocimiento y favores. Así, lograron viajar a Disney, recibieron donaciones y hasta les regalaron una casa cerca de Springfield.

Resultó que Gypsy Blanchard, que ahora tiene 32 años, estaba perfectamente sana y no tenía ningún retraso en su desarrollo como siempre habían creído sus amigos. Su madre tenía el síndrome de Munchausen por poder, un trastorno psicológico en el que los padres o cuidadores buscan simpatía a través de las enfermedades exageradas o inventadas de sus hijos, dijo su abogado litigante, Michael Stanfield.

“La gente constantemente le decía a Dee Dee lo maravillosa madre que era, y Dee Dee recibía toda esta atención”, dijo. 

Tras ser detenida, Gypsy testificó en el juicio que se llevó a cabo en 2018 que planificó junto a su novio,Nicholas Godejohn, matar a su mamá quien también la golpeaba y que una vez la encadenó a una cama. 

“Quería liberarme de su control sobre mí”, expresó ante el tribunal y aseguró sobre su exnovio, quien cumple cadena perpetua por el asesinato: “Lo convencí”.

Tras declararse culpable de homicidio en segundo grado y recibir la condena de 10 años de prisión, Gypsy aseguró que se arrepentía del hecho y expresó: "Nadie me oirá jamás decir que me alegro de que esté muerta o que estoy orgullosa de lo que hice. Lo lamento todos los días... ella no se merecía eso", agregó. 

No obstante en un documental la joven aseguró que prefiere los 10 años en prisión que la vida que llevaba junto a su madre. Asimismo reflexionó sobre su historia y sostuvo: "Quiero asegurarme de que las personas que se encuentran en relaciones abusivas no recurran al asesinato", afirmó. "Puede parecer que todas las vías están cerradas, pero siempre hay otra manera. Haz cualquier cosa, pero no tomes este curso de acción", enfatizó.
 

La historia de La historia de Gypsy Rose se narró en el documental "Mommy Dead and Dearest" (2017) y en la serie "The Act" (2019)  y un documental de Lifetime. 


 

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