Una tormenta devastadora golpeó Bahía Blanca, desencadenando un derrumbe en el Club Bahiense del Norte, donde una parte de la estructura cedió y provocó la muerte de al menos 13 personas, además de dejar a varias en estado crítico. 

Los vientos y lluvias ocasionaron estragos en varios barrios, resultando en voladuras de techos y dejando extensas zonas sin suministro eléctrico. Ante la magnitud del desastre, la Municipalidad calificó la situación como crítica, desencadenando la formación inmediata de un Comité de Crisis, en el cual intervinieron autoridades locales y provinciales.

El Gobierno nacional también se hizo eco de la emergencia, manifestando su compromiso para coordinar acciones de asistencia junto a las entidades locales y provinciales. Tanto el presidente Javier Milei como la vicepresidenta Victoria Villarruel expresaron sus condolencias a los familiares de las víctimas a través de las redes sociales, solidarizándose con el dolor generado por el inesperado suceso.

En el operativo de emergencia desplegado, participaron más de 250 efectivos entre agentes de Defensa Civil, Policía Bonaerense, bomberos, agentes de tránsito y personal médico. Hasta el momento, se reportan 14 personas en estado crítico, distribuidas en diferentes centros hospitalarios de la ciudad.

El parte médico más reciente detalla que ocho de los pacientes en estado grave fueron ingresados al Hospital Municipal, cuatro al Hospital Penna y dos al Hospital Privado del Sur. Las labores de rescate continúan en las instalaciones del Club Bahiense del Norte, donde se llevaba a cabo una festividad de fin de año del patín artístico al momento del fatídico evento meteorológico.

Ante la necesidad de albergue, la Municipalidad habilitó el Club Olimpo y el Dow Center como centros de evacuación, acogiendo a alrededor de 89 personas hasta el momento. Sin embargo, el restablecimiento del servicio eléctrico se torna incierto, ya que la empresa Edesa no pudo determinar el tiempo necesario para recuperar la normalidad en la ciudad.