Hoy se lanzó la beta abierta de League of Legends: Wild Rift, la versión para dispositivos móviles del MOBA de Riot Games, y después de algunas partidas es muy sencillo ver cómo esta reimaginación de League of Legends se convertirá en un nuevo fenómeno.
Aunque League of Legends es el juego más popular del mundo, más de un jugador se habrá encontrado con una experiencia absolutamente avasallante y una comunidad que no suele tener misericordia con los novatos.
Wild Rift, como los representantes de Riot para Latinoamérica explicaron en una presentación de la que Filo News formó parte, llegó para no solo ofrecerle una alternativa móvil a los jugadores de PC, sino también para darle la bienvenida a nuevos jugadores que no se hayan animado a probar la versión original.
Por eso Wild Rift comienza con un extenso tutorial, que repasa no solo los aspectos básicos del juego (que resultan útiles tanto para quienes no conozcan las dinámicas como para aquellos que tengan que acostumbrarse al nuevo sistema de control), sino también el funcionamiento general de la experiencia.
Esta versión para dispositivos móviles fue creada de cero —como se encarga de aclarar el estudio en cada oportunidad—, y no es un mero port de la de PC, algo que se nota desde la fluidez de las animaciones hasta la profunda optimización de los aspectos técnicos, pasando por la simplificación de algunos de las mecánicas, como la compra de objetos, y los héroes únicos creados especialmente Wild Rift.
Riot Games sabe que la primera impresión es la cuenta, y por eso no agobia al usuario con decenas de héroes desde el primer momento, sino que le ofrece una selección de personajes con características muy disímiles, pero que se adaptan a los diferentes estilos de juego: el guerrero balanceado, el tanque más resistente, el asesino veloz, el personaje con ataque a distancia, etc.
Asimismo, en lugar de obligar a los usuarios a realizar incontables tutoriales para que incorporen los muchos elementos que entran en juego en cada partida, el juego los lanza casi de inmediato a un enfrentamiento cooperativo con otros cuatro jugadores humanos enfrentando a una accesible inteligencia artificial.
Es virtualmente imposible no ganar esa partida, que entrega recompensas (como héroes y moneda del juego) y deja al usuario con una sensación de satisfacción por el trabajo realizado y curiosidad por los aspectos que puede no haber comprendido del todo. Es entonces cuando entra en juego la Academia, donde otras mecánicasb —algunas básicas y otras más profundas— se describen a través de sencillos tutoriales. Y para incentivar a realizar esas misiones, se entregan más recompensas.
Pero las ayudas no terminan ahí, porque incluso durante las partidas contra otros jugadores Wild Rift asiste constantemente al jugador, indicándole en qué zona le conviene estar, recordándole qué hace cada habilidad, y ofreciéndole consejos después de cada muerte.
Es claro que Riot Games puso el foco en ofrecerle a cada usuario una sensación de control y comprensión de lo que está sucediendo todo el tiempo en pantalla entre efectos, personajes y números que vuelan a diestra y siniestra. Y en ese sentido han cumplido el objetivo con creces.
Otro cambio atractivo de esta versión para dispositivos móviles es la duración de las partidas: un enfrentamiento promedio dura entre 15 y 20 minutos, lo que significa que no es necesario un compromiso de casi una hora para disfrutar de una partida, algo fundamental para quienes quieran disfrutar del juego en el sillón, durante la hora del almuerzo o antes de dormir, sin tener que alienarse frente a una PC.
El gaming en dispositivos móviles ya está instalado como una parte fundamental de la industria. Después de varios fenómenos casuales que encontraron su pico en Candy Crush, juegos como Fortnite, Call of Duty: Mobile, Free Fire y PUBG Mobile invadieron los celulares poniendo el género de los battle royale como la punta de la lanza.
Si bien ha habido MOBAs muy exitosos en dispositivos móviles, League of Legends: Wild Rift, gracias a la maquinaria de Riot Games que tiene detrás, se perfila como el nuevo dominador de las pantallas de jóvenes (y no tanto) alrededor del mundo.
League of Legends: Wild Rift ya está disponible para descargar de las tiendas de iOS y Android.