Era el comienzo del tercer set del partido que disputaban por la segunda ronda de Wimbledon la rumana Sorana Cirstea y la norteamericana Bethanie Mattek-Sands. Sin embargo, un mal movimiento cambió el rumbo del partido.
La estadounidense de 32 años corrió hacia la red, pero al momento de frenar su marcha, una de sus piernas se trabó en el césped y provocó la terrible lesión en su rodilla.
Inmediatamente, pidió ayuda en el piso de una forma desesperada que conmocionó a su rival Cirstea y a todo el público presente. "Help me please, help me please (ayuda por favor)", era el grito de Mattek-Sands, quien fue atendida y llevada al hospital más cercano para saber el grado de su lesión.
Una de las personas que más sufrió este terrible momento fue la tenista checa Lucie Safarova. Ella es compañera de Bethanie Mattek-Sands en dobles (son la pareja número uno del mundo) y se la pudo ver realmente conmocionada por este hecho, a tal punto de romper en llanto.