En pleno festejo del Real Madrid, los hinchas esperaron con ansias las palabras de Cristiano Ronaldo tras haber anunciado que podría abandonar el Club.
Ni bien apareció Ronaldo en la Plaza de Cibeles para celebrar la decimotercera Liga de Campeones, se besó el escudo y el estadio se vino abajo. El portugués agarró el micrófono y aseguró: "Es un orgullo jugar en el club más grande del mundo", arrancó Cristiano.
Pero inmediatamente fue interrumpido por sus compañeros del Real Madrid en pleno festejo de Champions para pedirle que no se vaya.
"Esto es muy importante, me siento a gusto por esta pasión que me demuestran, y estos futbolistas y cuerpo técnico, que trabajan para ser cada vez mejores. Lo que más me gusta es ganar y con estos jugadores es imposible no ganar Champions. Muchas gracias y hasta el próximo año", cerró Cristiano.
Si bien el delantero del Real no definió que pasará con su futuro, al menos tranquilizó en su discurso a todos los hinchas.