El volante de Barcelona, Andrés Iniesta, vivió este miércoles una particular situación en el Juventus Stadium, en el encuentro en que su equipo igualó 0 a 0 ante los italianos. El campeón del mundo con la Selección de España se fue reemplazado en el segundo tiempo, y la hinchada Bianconera lo despidió como se merecía.
De pie, los tifosi juventinos mostraron su respeto por uno de los mejores jugadores del mundo y se rompieron las palmas en aplausos para el fenómeno de 33 años, quien salió por Jordi Alba y le dejó la cinta de capitán a Lionel Messi.
En una acción que no se da en todos los estadios, los fanáticos del equipo turinés demostraron que los cracks, los campeones mundiales, los futbolistas verdaderamente grandes, no tienen fronteras. E Iniesta es un jugador verdaderamente grande.
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Gabriel Alejandro Mazzeo Galanti