En una noche soñada para los hinchas Xeneizes, Boca destrozó a Alianza Lima por 5 a 0 y aprovechó el triunfo de Palmeiras 2 a 0 sobre Junior de Barranquilla para clasificarse a los octavos de final de la Copa Libertadores.
El equipo de Guillermo Barros Schelotto tuvo encuentro muy cómodo y en el primer tiempo consiguió una ventaja monstruosa de 4 a 0 por los goles de Edwin Cardona, Frank Fabra y Ramón Ábila en dos oportunidades.
Los que asistieron a La Bombonera, con la tranquilidad en su terreno, se dedicaron a escuchar por la radio el duelo entre Palmeiras y Junior en Brasil. Se gritó fuerte por el elenco brasileño: los dos primeros goles de Miguel Borja y el penal atajado por Fernando Prass hicieron latir el mítico estadio de La Boca.
En la segunda parte y de vuelta en Buenos Aires, Carlos Tévez marcó el quinto para los locales, pero la cabeza estaba en el país vecino donde, después del descuento de Teófilo Gutiérrez, Borja convirtió el 3 a 1 y le dio una inyección de calma a la gente.
Los últimos 35 minutos sobraron en el juego y desde las tribunas solo cayeron aplausos. El buen humor reinó en el Alberto José Armando a pesar de los nervios que habían aparecido por la incertidumbre del otro partido.
Para el Xeneize también fue importante el ingreso de Fernando Gago, que vuelve a sumar minutos para empezar a dejar atrás las graves lesiones que sufrió.
Confirmada la victoria del Verdao en el Allianz Parque de San Pablo, Boca pudo desahogarse y festejar el pase a octavos de final como segundo del Grupo H.
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Gabriel Alejandro Mazzeo Galanti