Luego de una primera jornada negativa para los argentinos, Diego Schwartzman comenzó con el pie derecho su camino en el Australian Open luego de un sólido triunfo ante Filip Krajinovic, que tuvo un susto inesperado en el desenlace.
El argentino, número 13 del mundo, se impuso ante el serbio (39°) por 6-3, 6-4 y 7-5 en dos horas y 29 minutos de juego. En la próxima ronda, enfrentará al australiano Christopher O’Connell (173°), que viene de vencer al francés Hugo Gastón (67°) por 7-6 (7-4), 6-0, 4-6 y 6-1.
En la mañana de martes en Australia, noche de lunes en Argentina, el Peque dominaba el juego y aprovechaba los errores no forzados de su rival para marcar una cómoda diferencia de dos sets en el marcador. Sin embargo, en el tercer parcial, cuando parecía que tenía el encuentro bajo control con una ventaja de 5-2, Schwartzman comenzó a sentir molestias en su pierna derecha. Tras ceder dos games consecutivos, pidió la asistencia del médico. "No me puedo mover", le dijo a su equipo que lo miraba con preocupación desde la tribuna.
Luego de recibir masajes en el cuádriceps, con el tanteador 5-5, el argentino volvió al court como pudo, sacó adelante el partido con más corazón que juego y presionando en la devolución al europeo, que terminó haciendo su parte con una doble falta que sentenció el éxito del Peque.
Debut soñado para Báez
Sebastián Báez (95°) no se olvidará jamás de este 18 de enero de 2022. Es que el bonaerense consiguió un valioso triunfo ante el español Albert Ramos Viñolas (44°) por 6-4, 4-6, 6-3, 1-6 y 6-2, en tres horas y 26 minutos de juego para avanzar a la segunda ronda del torneo.
Se trató de la primera victoria del bonaerense en un Grand Slam, al que también accedió por primera vez de manera directa.
En la próxima rueda, Báez tendrá una dura parada ante el griego Stefanos Tsitsipas, el número 4 del mundo, que derrotó al sueco Mikael Ymer por 6-2, 6-4 y 6-3.