Tras doce años y 279 episodios llegó a su fin una de las series más exitosas de la historia de la televisión. The Big Bang Theory, la creación de Chuck Lorre y Bill Prady se despidió con un episodio doble que los fanáticos definieron en las redes como el final perfecto para la serie — aunque no vamos a entrar en spoilers por si alguien aún no lo vio.

The Big Bang Theory fue una sensación casi de inmediato, con una primera temporada que promedió los 8.4 millones de espectadores en los Estados Unidos. El grupo de nerds liderados por Sheldon (Jim Parsons) y Leonard (John Galecki) caló profundo en la cultura popular y se convirtieron casi sin quererlo en embajadores de cierta parte del fandom para el mundo.

La popularidad de la serie le valió visitas, cameos y apariciones de algunas de las personalidades más importantes del mundo del espectáculo y la ciencia a lo largo de la última década —un hito comparable solo con Los Simpsons—. Neil Gaiman, Bill Gates, Stan Lee, Stephen Hawking, George Takei, Ada West, Steve Wozniak, Elon Musk, Kevin Smith, Mark Hamill y Carrie Fisher son solo algunas de las caras conocidas que pasaron por los estudios de Warner.

El último episodio, transmitido el 16 de mayo pasado en los Estados Unidos, atrajo a casi 18 millones de espectadores en sus dos partes y superó los 23 millones en la medición de los tres días posteriores al estreno, convirtiéndose en el programa no deportivo más visto de la temporada 2018/2019.

The Big Bang Theory es la primera serie que termina su paso por la televisión norteamericana como la más popular (con un promedio de 12.7 millones de espectadores) desde el estreno de la última temporada de Seinfeld en 1998, y es la comedia multicámara más longeva de la historia superando a los 275 episodios de Cheers emitidos entre 1982 y 1993.

La creación de Chuck Lorre ha permanecido en el top tres de las series más vistas de la televisión norteamericana durante los últimos siete años y se ha llevado en ese tiempo una decena de premios Emmy, incluidas cuatro estatuillas consecutivas para Jim Parsons como mejor actor de comedia. 

De más está decir que The Big Bang Theory le ha cambiado la vida a sus actores principales, que cobran desde hace años un millón de dólares por episodio. Sin embargo durante el desarrollo de la serie se vivieron varios conflictos por los salarios dado que aunque el grupo es una verdadera unidad, para la productora las figuras reales son Galecki, Parsons y Kaley Cuoco (Penny). Simon Helberg (Howard) y Kunal Nayyar (Raj) se sumaron al grupo del millón de dólares recién en la temporada 10, y los cinco decidieron reducir su paga en un diez por ciento un año después para que el estudio aprobara un aumento para Mayim Bialik (Amy) y Melissa Rauch (Bernardette) de 200 a 500 mil dólares por episodio.

Con todo su éxito a cuestas, The Big Bang Theory también ha sido el blanco de numerosas críticas, en particular por su representación de la cultura nerd, su tratamiento de las minorías y los personajes femeninos. 

Mirando con un poco de atención al cuarteto masculino nos encontramos con individuos brillantes en su área pero que son el estereotipo de un nerd dividido en varias personalidades: el tímido intolerante a la lactosa, el antisocial, el que no puede hablar con las mujeres (a menos que esté ebrio) y el abiertamente acosador. A todos ellos les gustan todas las partes de la cultura nerd (desde Star Wars hasta Warhammer, desde los videojuegos hasta los comics), y ninguno disfruta de otro tipo de actividades que no tengan que ver con la ciencia o la tecnología.

A su vez, como otros productos de Chuck Lorre (te estamos mirando a vos Two and a Half Men), la serie atrapó al elenco en un mundo sin tiempo en el que hay un ligero desarrollo de personaje pero no un cambio real a su funcionamiento colectivo —porque de esas particularidades se alimentan los guionistas y el público—. Supuestamente Parsons después de amagar con dejar la serie durante años sería el responsable del final por negarse a renovar el contrato, pero los productores han hecho pública su intención de continuar con el producto indefinidamente.

Aún así, The Big Bang Theory ha hecho historia y su legado vivirá por siempre en el estudio 25 de Warner Bros Studio, bautizado “The Big Bang Theory Stage”. El spin-off Young Sheldon tuvo un comienzo un tanto tormentoso pero ya parece haber hecho pie y tiene confirmadas las temporadas tres y cuatro, y tomará el espacio de la serie que lo inspiró en el cronograma de la cadena.

Habrá sido una dura despedida para los fanáticos, que estarán rogando que sus actores favoritos no sufran la maldición de la TV y queden atados de por vida a sus papeles como le ha sucedido a tantos antes y les sucederá a tantos después. Sea como sea, lo importante es que The Big Bang Theory se fue haciendo ruido.