Para alguien que arrancó el 2019 ‘desempleado’, a Robert Pattinson no le está yendo para nada mal. Después de finalizar el rodaje de “The Lighthouse” (2019) -la cual tuvo su estreno mundial en el festival de Cannes durante el mes de mayo-, la marea empezó a cambiar a favor de la ex estrella juvenil que, tras la saga “Crepúsculo” (Twilight), decidió alejarse de las grandes producciones y volcarse a un cine más interesante e independiente con cosas como “High Life” (2018) o “Good Time: Viviendo al Límite” (Good Time, 2017) de los hermanos Safdie.

Parece que el actor está más abierto a otras posibilidades, ya que pronto va a poder añadir a su currículum la primera colaboración con Christopher Nolan en “Tenet” (2020) y la nueva encarnación del Caballero Oscuro, de la mano de Matt Reeves. Mientras que Nolan lo llamó para incluirlo en su película, el camino de Robert hacia el mundo comiquero fue un poco más personal porque, ahora se sabe, andaba con ganas de calzarse la capa y la capucha desde hace un tiempo, y no quería que su (buena o mala) fama, arruinaran la oportunidad.

En la primera entrevista que da desde el bati anuncio, Pattinson contó todos los pormenores detrás de este protagónico que, como muchos de los castings del murciélago, levantó un poquito de controversia entre aquellos fans que ni saben lo que quieren. En charla con Variety, el actor confesó que se puso realmente nervioso cuando el rumor de sumarse a “The Batman” (2021) se filtró por la web, incluso antes de sus pruebas de cámara. Listo, entre las noticias prematuras y la reacción negativa en las redes, Rob creyó que los ejecutivos de Warner Bros. lo iban a descartar, negándole la oportunidad de interpretar al único superhéroe de su agrado. “Cuando la cosa se filtró, estaba jodidamente furioso. Todos estaban muy molestos. Todos en mi equipo estaban en pánico. Pensé que eso había hecho explotar todo el asunto”.

Por suerte para él, la noticia lo agarró en un avión de camino al Sur de Francia, y mientras buscaba en Google cualquier pista sobre su “despido”, a su lado lo observaba Christopher McQuarrie. El director de las últimas “Misión: Imposible” le trajo un poco de tranquilidad, asegurándole que él también hubiera hecho lo mismo. Anécdotas aparte, Robert se quedó con el ansiado papel, abriendo otra vez la puerta al hype, la exposición pública y las temidas expectativas de la audiencia, algo de lo que no tenía que preocuparse desde que se alejó de Edward Cullen.

“Cuando era chico, (el de Batman) era el único disfraz que tenía”, confiesa el actor que creció en Inglaterra viendo las películas de Tim Burton. Claro que no va a decir en qué circunstancias lo usaba para no sumar más ‘controversia’ al asunto, aunque tampoco se siente tan intimidado por el backlash en las redes, y hasta esperaba una reacción más extrema de parte de los fanáticos. Se acuerdan que Ben Affleck pasó por lo mismo, ¿no?     

Al parecer, Pattinson estuvo vinculado a algunos proyectos de Marvel, pero Batman siempre fue su superhéroe más amado, según él, porque no tiene habilidades especiales. Hace rato que venía persiguiendo el papel, sobre todo desde que escuchó que Reeves estaba trabajando en un guión que reinventa la figura de Bruce Wayne en sus años más jóvenes: “Había tenido a Batman en mi mente por un tiempo. Es un poco absurdo decirlo. De alguna manera tuve una idea para interpretarlo y había estado presionando a Matt. Claro que no aceptó ningún chicaneo y seguí insistiendo para encontrarme con él”.

“De inmediato te sentís muy poderoso. Y es bastante sorprendente -algo en lo que es increíblemente difícil entrar-, por lo que el ritual de ponérselo es bastante humillante. Tenés cinco personas tratando de meterte adentro de algo. Una vez que lo tenés puesto, es como, ‘Sí, me siento fuerte, me siento duro, a pesar de que tuve que tener a alguien apretando mis nalgas’", Robert Pattinson

Cuando el realizador terminó su borrador, finalmente cedió y aceptó una reunión en Los Ángeles. En el medio de este intercambio, las noticias se esparcieron por las redes y durante la promoción de “The Lighthouse” en Cannes, al actor le tocó esquivar la inquisición de la prensa, mientras leía las páginas que le envía Reeves en el secretismo de su habitación de hotel. Así fueron los ensayos para sus audiciones, y casi que valió la pena. Horas después estaba en California probándose en batitraje para la fase final de una de las audiciones más complicadas de su carrera.

“De inmediato te sentís muy poderoso. Y es bastante sorprendente -algo en lo que es increíblemente difícil entrar-, por lo que el ritual de ponérselo es bastante humillante. Tenés cinco personas tratando de meterte adentro de algo. Una vez que lo tenés puesto, es como, ‘Sí, me siento fuerte, me siento duro, a pesar de que tuve que tener a alguien apretando mis nalgas’”, describe Robert sobre su experiencia con uno de los trajes más icónicos de la cultura pop, y no podemos más que quererlo.

Cuatro escenas ensayadas y cinco días después, Robert Pattinson se convertía oficialmente en el nuevo Batman de la pantalla grande, ganándole la pulseada a Nicholas Hoult. Un alivio para el actor que recibió la noticia en el primer día de rodaje de “Tenet”. ¿Coincidencia? Seguramente, pero el pibe no desaprovechó la oportunidad de hacerle algunas preguntas a Nolan -director de la Trilogía del Caballero Oscuro-, más que nada sobre la interacción con el traje y sus movimientos.

No hay mucho más que Robert pueda agregar sobre el futuro de “The Batman”, al menos, no hasta que comience su rodaje, pero parece que durante sus conversaciones con Reeves, el nombre de Joaquin Phoenix salió a colación (y muy a modo de spoiler), lo que podría suponer que a este nuevo Bruce Wayne, tal vez, le toque lidiar con su Joker. Algo un tanto extraño ya que “Guasón” (2019) no está conectada a ningún universo comiquero. Algo que puede cambiar, sin ningún problema.