Todo indica que tras el éxito de Game of Thrones, es el momento de Chernovyl, la nueva miniserie de HBO que busca convertirse en la producción más exitosa del mundo buscando la verdad, mientras las autoridades soviéticas por ocultar el más grave desastre nuclear de la historia, equivalente al estallido de 500 bombas atómicas.
En ese desafío, Craig Mazin, el creador de la serie, utiliza con frecuencia Chernobyl Podcast para abordar las discrepancias históricas del programa.
"Una de las lecciones más importantes de "Chernobyl" es que a la verdad no le importa lo que pensemos, termina imponiéndose", sostiene Mazin.
El trágico episodio que dispara la trama se desató el 26 de abril de 1986 cuando estalló el reactor 4 de esa central nuclear por un aumento en la potencia que provocó el sobrecalentamiento del núcleo y la explosión del hidrógeno acumulado en su interior.
Entre las diferencias notorias que hay al momento de comparar lo real con lo que muestra la miniseria, podemos destacar que todos los actores hablan inglés, ninguno tiene ni siquiera acento ruso. Mazin sostiene que hubiera sido ficticio el acento ruso. Los personajes se llaman entre sí "camarada", en vez del ruso "tovarich".
El protagonista de Chernobyl , Valery Legasov (1936-1988) -Jared Harris, en la miniserie- fue realmente un destacado químico y miembro de la Academia de Ciencias a quien los soviéticos enviaron pocas horas después de la tragedia, desde Moscú a la planta nuclear, un centenar de kilómetros al norte de Kiev, la capital ucraniana.
En la ficción, el relato comienza dos años después del accidente con el suicidio de Legasov, un hecho real. En su podcast Craig Mazin confiesa que lo que más lo atrapó de la historia real fue que el accidente se produjo en medio de un entrenamiento de seguridad, justamente para ver qué había que hacer en caso de una falla.
"Una prueba de seguridad desata el mayor desastre provocado por el ser humano en la historia de la humanidad", analiza Mazin.
Otro aspecto que lo intriga al autor es precisamente el suicidio de Legasov. El hombre dejó unas grabaciones poco antes de morir -no tan dramáticas como en la miniserie-, pero la ficción excluye un dato fundamental del científico, que no era un hombre solitario, sino que tenía una esposa y una hija pequeña.
Un episodio real del primer capítulo es que el ingeniero jefe Anatoly Dyatlov (Paul Ritter) creyó inicialmente que lo que habia explotado era uno de los tanques de la central, no el reactor y eso demoró un tiempo vital para la evacuación. Para los diálogos de esa escena Mazin se inspiró en las grabaciones registradas por Svetlana Alexievich, en el libro Voces de Chernobyl.
Otro de los detalles dramáticos que se aleja de la realidad es que aunque en la miniserie su esposa Lyudmila (Jessie Buckley) abraza a su marido contaminado por la radiación en el hospital, en la vida real comentó a The Guardian que los médicos no le permitieron tocar ni acercarse a su esposo.