La Academia se retracta: todos los Oscar se entregarán en vivo
Los organizadores cedieron ante el apremio de la comunidad creativa de Hollywood y dieron marcha atrás al plan de entregar cuatro galardones durante los cortes comerciales.
La presión funciona: gracias a los comentarios indignados de directores como Guillermo del Toro y actores de primera línea que incluyeron a Brad Pitt y Jude Law, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas se resignó a entregar los 24 premios Oscar en vivo, con presentación, apertura del sobre, y discurso de los ganadores incluido.
El 13 de febrero, la Academia había anunciado que cuatro de los premios se entregarían durante los cortes comerciales, y los discursos de los ganadores serían transmitidos en diferido. La indignación fue inmediata, en especial en el caso de los Oscars a mejor fotografía y mejor edición, dos disciplinas esenciales para el cine como lo concebimos actualmente.
Las primeras quejas vinieron de los directores, en especial el franco trío mexicano que forman Alejandro González Iñárritu, Guillermo del Toro y Alfonso Cuarón, tres ganadores del premio mayor de su categoría. A la furia se sumaron actores como Russell Crowe que expresó su desacuerdo en Twitter y Jude Law, uno de los muchos profesionales que firmaron una carta abierta pidiendo que la academia reconsidere.
Finalmente la Academia no tuvo otra opción y dio un paso atrás, aclarando que esto extenderá la ceremonia en al menos 20 minutos más. Un pequeño precio a pagar para un evento que no suele durar menos de 3 horas y media.
Es que los ratings no han favorecido a las últimas entregas. Los Oscar de 2018 fueron vistos por 26 millones de norteamericanos, un número impresionante que a la vez es el peor rating desde que se transmiten por televisión abierta. El año anterior el triunfo de “Luz de Luna” fue visto por 33 millones, y en 1998 fueron 57 millones de espectadores los que vieron a James Cameron recibir Mejor Película por “Titanic”.
2019 tampoco ha sido un buen año para la ceremonia de los Oscar. A fines del año pasado el evento se quedó sin su conductor Kevin Hart luego de que salieran a la luz una serie de tweets homofóbicos por los que el actor se negó a pedir disculpas. El plan de cortar tres números musicales fue cancelado por, según rumores, la amenaza de Lady Gaga de no presentarse si no se cantaban todas las canciones.
También se decidió terminar con la tradición de que los actores ganadores del año anterior entregue el premio a los nuevos campeones, algo que la actriz Allison Janney (ganadora en 2018 por “Yo, Tonya”) lamentó en su cuenta personal.
La decisión más reciente que dejó perpleja a la prensa fue que las nominadas a Mejor Película sean presentadas por famosos alejados del mundo del cine y la música. El domingo se filtró el primer nombre: Serena Williams presentará “Nace una Estrella”.
Por el lado positivo, es la primera vez en muchos años que el Oscar a mejor película no está cantado. “Roma” sigue siendo la favorita, pero las agrupaciones de creativos han premiado a películas distintas. Los actores a “Pantera Negra”, los productores a “Green Book”, y los guionistas a “¿Podrás Perdonarme?”, que ni siquiera está nominada a mejor película. Todo puede pasar este domingo 24.