Momentos de preocupación se viven en el país limítrofe con Argentina luego de que el brasileño Wosley Ferreyra Da Silva falleciera a causa de la fiebre amarilla.
El hombre de 38 años es la primera víctima fatal en el litoral del estado de Río de Janeiro y en plena temporada turística.
La Secretaría de Salud del lugar informó Da Silva murió después de pasar varios días internado en el Hospital General da Japuíba.
El hombre vivía en Praia de Provetá, una de las playas de la zona sureste de Ilha Grande, la mayor de las islas que forma parte del archipiélago frente a Angra.
"La Alcaldía de Angra dos Reis recomienda expresamente a todos lo que aún no han sido vacunados contra la fiebre amarilla que no vayan para Ilha Grande, las áreas selváticas y las cascadas", resaltó en un comunicado el alcalde de la ciudad, Fernando Jordão.