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Visibilizar cómo viven los animales en criaderos debería ser motivo suficiente para que tu amigo que sigue comprando perros de raza entienda que fomenta una industria horrible. Te mostramos por lo que luchan las organizaciones y la felicidad de quienes adoptaron a un animal de la calle.
Estar más tiempo en casa es un buen momento para pensar en cómo sacar algo positivo de la cuarentena que estamos atravesando. Desde remodelar tu casa hasta postularte como tránsito de algún animal que lo necesite (y hasta podés llegar a enamorarte de esa mascota y adoptarla). Amigo a Casa, Soplo de Vida, Proyecto 4 Patas y Colitas Sin Hogar nos contaron todo lo que tenemos que saber del proceso desde que rescatan a un animal, la importancia de los hogares de tránsito, cómo se adopta una mascota y el horror que son los criaderos a quienes mucha gente acude para comprar cachorros de raza.
"Los criaderos son fábricas de perros que lucran porque hay una clientela dispuesta a comprarlos", Proyecto 4 Patas
El trabajo de las organizaciones comienza desde que reciben un aviso o cuando encuentran animales abandonados durante sus recorridos. El primer paso al recibir un animal es llevarlo a una veterinaria para que le hagan los estudios correspondientes. La mayoría necesita hacer algún tratamiento y otros deben someterse a operaciones complicadas después de pasar una dura vida en la calle o siendo maltratados.
Las organizaciones trabajan con hogares temporales hasta que el animal esté listo para ser adoptado por su familia definitiva. Los tránsitos son personas que ofrecen su casa y se comprometen a seguir con los tratamientos del animal, llevarlo al veterinario si es necesario y darle un techo hasta que aparezca un adoptante.
“Uno cree que adoptando un animal de la calle, le salvás la vida al animal... pero nos terminamos dando cuenta que es al revés”, Lucía
“Pueden fallar muchas cosas: desde que el rescate se frustre porque el animal se escapa del miedo que le dan los humanos o por accidentes. En la etapa del tránsito puede pasar que el transitante no pueda (o no quiera) transitar más y haya que cambiar al animal del lugar, eso es súper estresante para ellos”, contaron desde Soplo de vida. “Algunos tránsitos son una maravilla y otros dejan muchísimo que desear. A veces tenemos la presión del transitante preguntando ‘¿cuándo se va?”, dijeron de Colitas sin hogar. Algunas organizaciones tienen refugio propio y los casos más complicados se los quedan ellos hasta que se recuperen porque necesitan cuidados especiales antes de estar listos para ser adoptados.
En Amigo a casa remarcan la importancia de ser hogar temporal, en especial para aquellas organizaciones que no tienen refugio propio y dependen de los transitantes para seguir rescatando: “Todos los gastos siempre están cubiertos por la agrupación, solo tiene que brindar un techo y amor para que el rescatado pueda recuperarse de la mejor manera posible. Sin hogares de tránsito nuestra tarea se vuelve imposible”.
Cuando el animal está recuperado de sus días en la calle, está listo para ser adoptado por una familia que le dé amor por el resto de su vida. Cuando este momento llega, las organizaciones publican al animal en sus redes sociales y a los interesados les envían formularios de pre-adopción. Las agrupaciones intentan que los animales sean adoptados por familias ideales para cada uno, pero este proceso a veces no sale como esperan.
“Muchas veces la familia que creíamos perfecta no termina siendo así. Muchas veces nos devuelven perros como si fuesen un paquete”, contaron desde Amigo a casa y sostuvieron que “bajo ningún punto de vista devolver un animal es una opción: ni aunque te mudes, ni aunque tengas un hijo ni aunque el perro se porte mal”. En Soplo de vida coinciden en que, a pesar de hacer un cuestionario y entrevistas, a veces devuelven al animal: “Son cosas que nos exceden”. Otra de las terribles cosas que puede suceder es “que nadie quiera adoptarlo”, sostuvieron desde Colitas sin hogar.
“Bajo ningún punto de vista devolver un animal es una opción: ni aunque te mudes, ni aunque tengas un hijo ni aunque el perro se porte mal”, Amigo a Casa
Cuando se trata de cachorros o perros de raza la gente se desespera enviando solicitudes para adoptar, pero no sucede lo mismo con los animales más viejitos. Lo que no saben es que los perros o gatos mayores son mucho más tranquilos y requieren menos trabajo que un cachorro. Sobre la raza y el aspecto físico vamos a hablarlo más abajo en esta nota porque es un punto que enoja bastante a los verdaderos amantes de los animales.
“Todos los criaderos funcionan bajo el mismo principio: generar ganancias con la procreación de animales. Podemos hablar de mejores o peores criaderos según las condiciones en las que tienen a los animales, pero ninguno es bueno”, explicaron desde Soplo de Vida que fueron a varios allanamientos. La organización desarrolló por qué ningún criadero es bueno: “Hay más de 6 millones de perros y gatos en situación de calle. Ni el 1% logra encontrar una familia y muere en la calle. La procreación en criaderos solo aumenta la cantidad de animales, es innecesario. No castrar a los animales trae muchos problemas de salud, además de la reproducción”. Para cerrar con su opinión respecto a esta industria, concluyeron: “Los únicos que se benefician son los humanos que obtienen ganancias, los animales son víctimas y desarrollan muchas dificultades de salud y de comportamiento”.
Proyecto 4 Patas fue depósito judicial de criaderos tras una intervención legal y también entraron a criaderos para rescatar animales destrozados: “Son fábricas de perros que lucran porque hay una clientela dispuesta a comprarlos. ‘Criadero’ en Argentina es agarrar un perro de raza, cruzarlo con otro de raza y tener en las peores condiciones posibles ya que el animal es usado como una cosa para generar objetos (cachorros) que dan plata”.
La organización no solo apuntó a la industria, también fueron contra aquellos que consumen esto: “¿Cuántas personas que compran el canichito por Mercado Libre se preocupan por saber las condiciones sanitarias y la vida de la madre? Es un negocio de explotación animal bancado por una parte de la sociedad, por el Estado inoperante y ausente y, por supuesto, por un gran equipo de veterinarios mercenarios”.
Los animales que ya no sirven para reproducir (y generar ganancias) son descartados por estos empresarios: abandonados en la calle, metidos en bolsas hasta que mueren, ignorándolos en los predios sin ningún cuidado sanitario.
"Me hace feliz saber que contribuí con mi granito de arena para que un perrito menos este sufriendo el abandono y la indiferencia", Constanza
Para Colitas sin Hogar “elegir comprar es permitir que otro animal muera en la calle. Significa que tenés el espacio, los recursos, el amor y la buena predisposición pero preferís dárselo a un animal por sus características físicas y no por el deseo real de sumar un nuevo integrante a tu hogar. Miles de perros y gatos mueren en las calles sin haber conocido el amor de una familia”. Reforzaron el problema de sobrepoblación de animales en la calle: “La situación es incontrolable. Miles continúan reproduciéndose: rescatamos a uno, pero al otro día hay una perra pariendo otros 11. Si nadie hace nada, esos 11 en siete meses pueden tener otros 11 cada uno. Así, exponencialmente crece el número cada día”.
“Adoptando ayudás a que un animal salga de la calle y pueda tener una vida digna, algo que seguramente nunca tuvo. Hay gente que no sabe que no castrar a un animal trae consecuencias en su salud, claramente en los criaderos no están castrados. Comprando un animal fomentás que este negocio horrible siga funcionando”, declararon desde Amigo a Casa. Respecto a la raza, recomendaron: “Todo animal, de raza o no, tiene el mismo amor para dar. Hay que dejar de ver a los animales de raza como algo lindo por lo que uno pagaría y empezar a ver a todos con los mismos ojos”.
Al respecto opinaron desde Soplo de Vida: “¿No les parece absurdo reproducir indiscriminadamente cuando ya existe una sobrepoblación? Si solo hay una raza en particular que te gusta sería interesante pensar qué es lo está buscando en ese perro: ¿estatus, belleza o amor? El amor es el mismo, sea o no de raza”.
Como adoptante de un animal de la calle sé que te cambia la vida. No hablo de hacerse cargo, darle amor, cuidarlo y las responsabilidades que llegan al tener una mascota. Puede considerarse un sentimiento egoísta, pero con mi familia sentimos satisfacción por haberle salvado la vida (aunque todos los días nos damos cuenta que él nos salvó a nosotros). La veterinaria nos dijo que había tenido moquillo (sufrió muchísimo solo) y por eso tiene un tic que de a poquito va aumentando. A veces pensamos “que bronca no haberlo podido ayudar antes” y después nos damos cuenta que le estamos dando todo lo que podemos para que tenga la vida que se merece. Al principio fue desconfiado, pero el amor y el agradecimiento que muestra Licha todos los días es inexplicable y es lo más lindo que sentís como adoptante de un perro de la calle.
Constanza (25) adoptó a Kenya y está transitando a una perra adulta que llegó embarazada y la ayudó a parir 10 cachorros en el living de su casa. “Me siento llena de amor por todos lados. Nunca había sentido un amor tan incondicional como este. Siempre tuve perros, pero con Kenya es distinto. Tenemos una conexión única, la miro y ya sé lo que le pasa. Al haberla adoptado cuando tenía tres meses, estuvo muy poquito tiempo en la calle. Pude educarla yo de cero. Nunca vi a una perrita tan feliz como ella. Particularmente, no encuentro ningún aspecto negativo de adoptar. Todo lo contrario. Saber que contribuí con mi granito de arena para que un perrito menos este sufriendo el abandono y la indiferencia me hace feliz. Sé que puede ser difícil adoptar a un perro adulto que viene marcado por muchas experiencias (como transitante de dos perritas adultas lo viví). Pero doy fe de que ese trabajo viene recompensando con creces. El amor que te dan es inmenso. Volvería a adoptar siempre y lo recomiendo 100%. ¿Para qué pagar y fomentar el maltrato animal en los criaderos si tenés miles de perritos en la calle sufriendo y esperando un poquito de amor?”.
Lucía (25) creció en una casa llena de animales rescatados de la calle. El ejemplo que tuvo desde chica influyó para que ahora siga agarrando perros y gatos al costado de la autopista o en la puerta del club. “Cuando uno adopta, solo siente amor. Es re cliché, pero es verdad. Los animales son súper agradecidos. Sobre todo cuando son animales adultos. No importa cuánto hace que están viviendo con vos, en cada caricia, juego, paseo, siesta en tu cama, ves en su cara la tranquilidad de saber que está seguro y que finalmente encontró a su familia”.
Sobre algo que todos los que adoptamos vamos a coincidir, Lucía pudo ponerlo en palabras: “Es triste mirarlos y no saber qué fue de su vida antes de cruzarse con uno: desde cuantos años realmente tendrá, si alguien lo quiso, si alguna vez tuvo nombre, si pasó mucho frío, si cuando llovía encontraba un techo para dormir. Es más triste todavía verlos asustados durante una tormenta, porque si así reaccionan estando protegidos, vaya uno a saber cómo la pasarían allá afuera. Lo mismo cuando llegan las fiestas y aparecen los vivos de siempre con pirotecnia”.
“Siempre me enojé mucho con la gente que cree que el mejor perro o gato es aquel de raza que comprás en criaderos, cuando el mejor animal para ellos seguro está a la vuelta de la esquina, y acepta mimos y amor como parte de pago”, reflexionó y cerró: “Uno cree que rescatando un animal de la calle, le salvás la vida al animal... pero nos terminamos dando cuenta que es al revés”.
“Adoptá, castrá, generá conciencia y empatía”, fomentan desde Proyecto 4 Patas. Si no podés adoptar, transitá. Si no podés transitar, doná. Si no podés donar, difundí. Prestá atención por si encontrás algún animal en la calle o ponete en contacto con alguna organización que rescate animales y ofrecete para ayudar como puedas.
Banco Galicia
ANTONELLA BASCHIERA
CA CTA: 4028024-0 026-1
CBU: 00700269-30004028024018
ALIAS: BORDE.PALMA.ANILLO
CUIL: 27-34602414-9
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Asociación Civil Proyecto 4 Patas
Cuenta Corriente en pesos Nº 50634/8
Sucursal Nº: 05002 – San Antonio de Padua
CBU: 0140059501500205063480
CUIT: 30-71080554-3
Para donar hacé clic acá.
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