A dos años y medio de la muerte del fiscal Alberto Nisman, en su departamento del edificio Le Parc en Puerto Madero, las pericias continúan en su curso y revelaron una información que podría ser trascendental para el desarrollo y la Justicia.
En las últimas horas, una nueva pericia toxicológica llevada adelante por la Gendarmería Nacional determinó niveles positivos de sustancias de clonazepán y ketamina. Ahora, dichos estudios estarán en manos de la Justicia por las próximas semanas.
Si bien la causa de la muerte del titular de la Unidad Especial AMIA estaba en manos del juez federal Julián Ercolini y del fiscal Eduardo Taiano, las pericias habían sido ordenadas por la magistrada Fabiana Palmaghini, cuando la investigación estaba en la órbita del fuero ordinario.
Respecto a las sustancias, cabe resaltar que el clonazepan se utiliza habitualmente en drogas para inducir al sueño como ansiolíticos, mientras que la ketamina es utilizada como sedante para animales, aunque tiene fines recreativos que causan efectos pseudoalucinógenos.
La nueva pericia positiva, realizada ante la mirada del experto informático Diego Lagomarsino y la familia de Alberto Nisman, sería presentado ante el titular del Juzgado Criminal y Correccional Federal número 10 para dar inicio a un nuevo expediente.
El fiscal fue hallado muerto en el baño de su domicilio con un disparo en la cabeza, en lo que se continúa investigando si fue un suicidio o un homicidio. El hecho ocurrió horas antes de que se presente ante la Justicia, denunciando a la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner de encubrimiento a Irán en la causa del atentado a la AMIA.