"Estamos todos realmente conmovidos", aseguró esta mañana el presidente Mauricio Macri sobre el ataque que sufrió en inmediaciones del Congreso el diputado radical riojano Héctor Olivares y uno de sus asesores y funcionario en esa provincia, Miguel Yadón.
"Estamos trabajando y estamos junto a los médicos que intentan salvarle la vida a Héctor", dijo Macri.
Aseguró que ya están trabajando la Policía de la Ciudad y la Policía Federal y que "vamos a ir hasta las últimas consecuencias para entender qué pasó y encontrar a los culpables".
Macri agregó que habló con la esposa del diputado Olivares, Susana, y con su hijo. "Están camino a Buenos Aires rezándole a Dios para que podamos salvarle la vida a Héctor".
El presidente se refirió a Olivares como "una gran persona, un trabajador, preocupado por nuestro país".