Rusia también echó diplomáticos estadounidenses y cerró un consulado
El gobierno ruso decidió expulsar 60 diplomáticos de Estados Unidos y cerrar su consulado en San Petesburgo en respuesta a una acción similar de Estados Unidos y otros 27 países por el caso del envenenamiento del ex espía ruso Sergei Skripal y su hija Yulia.
Las autoridades británicas culparon a Rusia por envenenarlos con un agente nervioso, y se lanzaron a una batalla diplomática con el respaldo de sus socios más potentes.
En una acción conjunta sin precedentes, Estados Unidos, la OTAN y 26 países, muchos de ellos de la Unión Europea, expulsaron a más de 150 diplomáticos rusos.
Rusia ya había advertido esta semana que la respuesta a esa acción sería proporcional.
Sergei Skripal, de 66 años, era un doble agente de los servicios secretos rusos y británicos que fue descubierto y encarcelado en Rusia; pero años más tarde consiguió la libertad en un intercambio de espías y se fue a vivir a Salisbury, en el sur de Inglaterra.
Londres cree que él y su hija fueron envenenados con un agente nervioso desarrollado por Rusia en la época soviética, pero el gobierno ruso alertó ayer de que en un laboratorio secreto británico cercano a Salisbury se practicaron ensayos militares días antes del envenenamiento de los Skripal y apuntó directamente a las autoridades británicas.