Si bien tienen encanto, elegancia y buen gusto, y son amables y pacíficos, no les gusta que se les contradiga. Disfrutan en cambio, de contar con el apoyo de los demás.

El lado negativo de los librianos es que es normal que cambien de opinión y de lealtades. No les gusta la rutina y muchas veces les falta la capacidad de enfrentarse a los demás. 

Son amantes del placer y esto les puede llevar a cometer ciertos excesos en su vida.

Son muy curiosos, lo que puede ser una virtud si lo invierten en descubrir nuevas cosas, pero también un defecto si les lleva a meterse demasiado en la vida o los asuntos de los demás.

En el afán por verse bien ante los demás, los Libra pueden tender a caer en la superficialidad y la vanidad.